top of page
Buscar

Navegando a través del dolor: Mi viaje personal en medio de una tristeza global



La última semana ha revelado atrocidades que han dejado a muchos, incluyéndome a mí, sintiendo un torbellino de emociones: miedo, tristeza, conmoción y el corazón totalmente roto. Encima del dolor global, recibí noticias de tragedias personales que sacudieron mi núcleo, agitando mis miedos más profundos. Navegar por este paisaje de tristeza fue, por decirlo suavemente, arduo.


Sin embargo, en estos momentos de profundo dolor, me aferré a ciertas creencias y prácticas que me anclaron. Comparto esto no como una receta universal, sino como una mirada íntima al conjunto de herramientas de mi alma, con la esperanza de que, tal vez, alguien pueda encontrar consuelo o resonancia.


1. Sentimiento de solidaridad y amor profundo: Siento una compasión y amor profundos por aquellos que están sufriendo intensamente en estos momentos. Es natural que, en situaciones de crisis, surjan miedos personales y el temor a que estas tragedias puedan afectarnos directamente. Sin embargo, para transitar esos miedos, he encontrado consuelo en el reconocimiento de que cada uno de nosotros tiene su propio camino y desafíos. En lugar de dejarme consumir por el miedo, elijo creer que aprendo a través del amor y que mis días de aprender a través del dolor están detrás de mí. Dicho esto, mi corazón se extiende a todos aquellos que están viviendo este dolor de manera directa y quiero que sepan que están siendo abrazados, apoyados y amados en cada pensamiento y palabra.


2. Vibrando amor y gratitud: como seres energéticos, atraemos lo que vibramos. Por lo tanto, en estos tiempos turbulentos, he tratado de enfocarme en sentimientos de amor y gratitud. Estar viva, estar aquí, tener la capacidad de experimentar y expresar amor: estos han sido mis anclajes. En esta tormenta, mi faro más potente ha sido la creencia de que brillar mi luz de amor y positividad es la mejor manera en que puedo contribuir a la sanación global.


3. Perspectiva sobre el dolor: Podría sonar contraproducente, pero siento genuinamente que quienes me rodean se benefician más de mi amor que de mi tristeza o ira compartida. Si bien la empatía es crucial, creo que el mundo sana más a partir de la fuerza y esperanza compartidas que de la tristeza compartida.


4. Nuestra esencia eterna: Por último, una creencia que podría no resonar con todos, pero que ha sido instrumental para mí: Todos somos almas teniendo una experiencia terrenal temporal. Nuestra verdadera esencia es espiritual, no meramente humana. Los desafíos, el dolor, los altos y bajos, son todas experiencias transitorias diseñadas para la evolución de nuestra alma. Personalmente, me imagino regresando a un reino de unidad, donde las almas coexisten en armonía, después de nuestro viaje terrenal.


Ahora, esta última creencia es profundamente personal y entiendo que podría no alinearse con la visión del mundo de todos. Y eso está bien. Es esencial encontrar lo que nos ancla individualmente.

En estos tiempos, mientras nuestro piso puede parecer inestable, son nuestras creencias y prácticas personales las que pueden proporcionar cierta sensación de estabilidad. Mi corazón está con todos los que están sufriendo y espero que encuentren su brújula única que los guíe a través de esta tormenta. 🖤
0 comentarios

Comments


No te pierdas ningún artículo, suscríbete...

¡Gracias por suscribirte! Estoy segura que te vas a divertir...

bottom of page